Buenas!
Ahora que las tiendas se han vuelto locas y tenemos compartiendo espacio helados, chuches para Halloween, castañas, boniatos e incluso turrones y polvorones… Vamos a hablar un poco de la estacionalidad del Hobby.
Ya sabéis, cuando estáis esperando como locos a que llegue la temporada de belenes para comprar escenografía barata :P
La idea detrás de esta entrada viene por mi impresora 3D. Como muchos sabréis, la compré de 2ª mano, a un amigo del Sr Blanco. No porque fuera mal (va muy bien) si no porque se compró un modelo más actual (y, por lo tanto, superior). Los modelos superiores actuales suelen tener una serie de características comunes: más “Ks” que los otros (¿Qué van, por el 12K ahora?), superficie de impresión más grande (uno suele cambiar a algo más grande, para imprimir más cosas XD) y “pijaditas”. Pijaditas tipo “autocalibración”, “control de temperatura” … Cosas que puedes solventar de otra manera, pero que si te vienen en la máquina pues eso que ganas.
Mi impresora no tiene estufa. Además, la tengo en la terraza. Así que para poder imprimir por encima de los 20ºC que recomienda el fabricante de la resina, dependo de la temperatura exterior. Y se supone que estamos en otoño, aunque la temperatura no sea la más propia, por lo que imprimir en el exterior es arriesgarse. Estamos por encima de los 20º, pero no tan por encima.
La solución es sencilla: comprar una estufa para la 3D, que te mantendrá esa temperatura óptima de impresión, independientemente de la temperatura exterior. No es que sea cara, pero las que he visto en amazon van de 30-40€ para arriba. Y a mí la 3D me costó 70€… Claro, empiezas a pensar que para gastarte 40€ en una estufa te los guardas, los pones junto con otros 100 y te compras una máquina nueva que tenga la estufa incorporada y demás pijadas. No sé si el rango de precios es correcto, pero es la conversación que tengo en mi cabeza conmigo mismo xD
Entonces… ¿qué hacer? Tengo dos opciones, la verdad. La primera es meterle al armario donde tengo la 3D un calefactor de baño que uso poco, para calentarlo cuando vaya a imprimir xD La segunda (que es la que estoy haciendo) es no imprimir hasta que no llegue el verano :P Me he impreso unas 100 minis, de las que he regalado una parte. Pero aún así tengo minis impresas de sobras para pintar todo el invierno (sin contar toda la montaña gris que tengo previa).
Así que, para mí, el “hobby de la impresión 3D” va a ser un hobby de verano. (Hasta que me compre la estufa y me tire todo el invierno imprimiendo también… ¡que hay mucho tiburón que sacar!).
Acumularé proyectos en verano para pintar en invierno.
Un plan sin fisuras… que hace aguas por todas partes xD Pero eso ya me lo demostrará el tiempo, seguro.
Así que tengo una parte del hobby con una marcada estacionalidad, y el blog abandonado… Así que me dio por pensar. ¿Hay otras partes del hobby que sean estacionales? Oh, sí…
Vamos a hacer una lista no exhaustiva de las cosas que se me ocurran según mi experiencia…
- Primavera. Empieza el buen tiempo de nuevo. ¿Cosas frikis? Seguro que pintar minis está en la lista. Posiblemente acudir a eventos, torneos o similares.- Verano. “Hace mucho calor para pintar” suele ser un comentario habitual. Y aunque sea cierto, en mi caso es cuando más puedo pintar. Suele haber un par de semanas que me quedo solo en casa, y aprovecho para ponerme con algún proyecto intensivo (este año, el ejército orko de 2ª edición). Para el resto de mortales, como hace calor para pintar, montar seguramente sea una opción. Para mí, eso implica también el uso de la 3D. ¡Vamos a preparar proyectos!
La pintura en verano, a los 3 segundos de sacarla del pote
- Otoño. Aumenta la humedad ambiental, así que la pintura no se seca tan rápidamente. Empieza a hacer peor tiempo, así que las actividades de interior se magnifican. Es época de ir al club a jugar, de empezar ligas y campañas, de pintar esos proyectos veraniegos. También es tiempo de acudir al bazar más cercano y ver qué puedes aprovechar de los adornos de Halloween como escenografía xD- Invierno. Según donde vivas, hace frío. En la ciudad condal, últimamente la llegada del invierno solo implica que tienes que ponerte una chaqueta, en vez de ir en manga corta. Se hace de noche pronto, pero eso no te afecta porque tienes varias lámparas para pintar con una luz uniforme. Pintas y pintas, porque hay un torneo grande en primavera al que quieres ir… También aprovechas para ir a los bazares, a pillar cosas destinadas a los belenes pero que te pueden ir bien como escenografía. O como NPCs… ando pensando en pillar animales de granja para ambientar partidas al Haifoot Jousting o similares :P
Y vuelta a empezar el ciclo. Obviamente, no todo es aplicable a todo el mundo, pero creo que es una aproximación bastante buena a la que sería la realidad de un año friki. En invierno pintas, en verano montas. Y las ligas/campañas las empiezas en septiembre, con el curso escolar…
Y vosotros, ¿qué? ¿Vuestro año friki es muy diferente a esto u os he retratado a la perfección? :P

Yo tengo claro que mi estación de pintura es verano. Desde hace cuatro años pasamos los veranos en casa de mis suegros y no hay tanta tarea que hacer, así que aprovecho las siestas de las niñas para sudar fuerte y pintar minis.
ResponderEliminarEl resto del año voy encontrando ratos sueltos, cada vez más a medida que crecen las gremlims... Digo, las Peques
Buenas. En mi caso suelo empezar el año fuerte con el propósito de pintar muchas minis. En verano casi siempre pincho, no por calor, si no por hacer otras actividades. En otoño me suele costar arrancar y para finales de año hago un último sprint intentando que la marea gris sea más reducida que a inicios de año XD
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