"Me gustaba el Street Fighter cuando era creíble, bueno, todo lo creíble que puede ser un videojuego de lucha donde la gente dispara bolas de fuego, te pegas con hombres-mono que sueltan descargas eléctricas o que tiene un ninja español que lucha en un tablao flamenco con rejas.
Pero con las sucesivas secuelas, el plantel de luchadores se ha dividido en tres grupos inamovibles. En el primero están los personajes que conocemos de toda la vida, a los que han envejecido con mayor o menor acierto pero que al final son lo único por lo que te miras el juego ni que sea de lejos.
En la segunda categoría están los horteras y víctimas de la moda que molan un montón a la muchachada, pero que tu no tienes ni puta idea de que coño pintan en un juego de lucha. Pagaría por ver subir a uno de esos moñas a un ring de MMA y ponerme ciego de palomitas mientras los convierten en pulpa sanguinolienta.
Y en la tercera están los que entran en la categoría de gente a la que les podría sin esfuerzo. No sé pelear, ni estoy en forma. Pero joder, con una niño de 14 años puedo. Sobretodo porque en el SF se puede pelear con armas blancas. Solo necesito mi bate de baseball y dos cervezas para ganar esa pelea. Lo que me lleva a otra pregunta.
¿Para cuando un luchador friki que pelea usando objetos contundentes, grita cosas en klingon y se desmaya de cansancio después de cada counter? Con alguien así, sí que compraría el juego..."
Bienvenidos niños y niñas a la casa de "...con todo no se puede". Una expresión que puede dejarte fácilmente sin trabajo en el ramo del cine para adultos, pero que en términos de la vida real implica que tienes más cosas que hacer que horas para hacerlas todas y algo tienes que dejar de lado para que salgan las cosas importantes.
No es que el muñequismo para aficionados no sea importante, pero trata de explicarle al banco o al médico que no te van bien sus horarios, si quieres tener acceso a tu dinero o acabar el año con vida a veces te toca hacer concesiones. Que le vamos a hacer. Nadie dijo que la vida fuera a ser fácil.
TAMPOCO ME DIJERON QUE IBA A SER POBRE Y FEO
Pero no me quejo, como dice el hombre sabio, si salgo a la calle quejándome de que soy pobre y feo, solo tengo que mirar a mi alrededor para encontrar a alguien más pobre y más feo que yo. Hasta que llegue el día en que eso no suceda, momento en que me inscribiré en el libro Guinnes de los records a ver si gano algo.
¡Menos tontadas! Esta semana por motivos que ya he expuesto me ha pillado un poco bastante el toro, estoy metiendo una entrada que era para el lunes un jueves, no he pintado absolutamente nada y no he escrito nada de lore. Si la cosa va bien lo acabará haciendo el Chat_OGT por mi, pero debo estar configurando algo mal porque todas las historias acaban con los personajes en la cama.
Me dejé para el final la infantería y los fillers, que es lo que tiene más trabajo con diferencia. Pero no me preocupa porque A.- Ya tengo 1.000 puntos pintados, B.- Pinto muy rápido cuando quiero, lo único que necesitaba es montarlo todo lo antes posible y en eso invertí todo el día de ayer.
¿Demonios con ballestas? A donde vamos a llegar. |
Conseguí una segunda caja de Demonios de Frostgrave que solucionó de un plumazo mis problemas de variedad y disponibilidad de tropas. Con 40 cuerpos para empezar a trabajar, lo primero fue un capricho en forma de unidad de disparo que seguramente usaré como hostigadores. Y con ello quedaron aprovechadas las ballestas que trae la matriz. Además de que queda más bonito llevar un poco de todo.
Las mazas siempre acaba en la izquierda de la unidad tarde o temprano. |
Obviamente les faltan los escudos. |
Necesito otro de esos, por motivos. |
Lo que tienes en un instante en cuanto metes un Campeón a la unidad y un filler en peana de 50x50. Me gusta mucho como queda esa miniatura de Mantic para rellenar. Se ve un poco rara por la diferencia de color del plástico, pero una vez pintada dará el pego al 100%. El Campeón está hecho con una miniatura de plástico de Avatars of War y piezas sueltas de la matriz de Demonios de Frostgrave. Lo empecé a pegar todo sin ningún plan definido y la verdad es que me encanta como quedó, por lo que fijo que me hago otro.
Tengo como 5 páginas escritas, con una cronología como las que hacemos siempre, hilando la historia lo mejor posible, con algunos personajes, batallas importantes, cambios en el mapa y... cero épica. Creo que gasté todo el mojo escribiendo sobre los Greorianos, ahora todo lo que sale de aporrear el teclado me parece repetitivo y aburrido. Por lo que es muy posible que lo dinamite y empiece desde cero.
Lo único que tengo claro es que voy a jugar con el paralelismo entre estas criaturas y los demonios de la religión cristiana, pero más hacia el antiguo testamento, la parte que se mezcla con la mitología heredada de los Sumerios. Donde los demonios son criaturas que habitan en otro plano, con su propia civilización y no son necesariamente malvados por naturaleza, o no más malvados que cualquier otro ser inteligente.
Un infierno de posibilidades arquitectónicas. |
¿Qué tengo claro? La primera es que los Nephilim vienen de otro plano, otra dimensión u otro mundo, como queráis llamarlo. Son alienígenas en el mundo donde se encuentra el continente de Dralon. También tengo más o menos claro que la Legión Nephilim está compuesta al menos por dos razas, los Nephilim y los Grigorim. Siendo estos últimos unas formas de vida menos evolucionadas, que habrían sido en su día los amos de los Nephilim pero actualmente luchan a su lado.
Grigorim de fiesta. |
Parece que me vuelto a inspirar... pena que tenga que recoger la casa, bajar la basura y preparar la comida. A ver si esta noche la gata me deja escribir un rato.
Seguiremos informando.