[Eddie Cabot] Frostgrave: Vine a Felstad por trabajo y me pegaron un flechazo.

"Se que esto es un topicazo, pero cuando yo era pequeño (allá por el Jurásico), los monstruos de cine se diseñaban para dar miedo. Los vampiros, los hombre lobo, el monstruo de Frankenstein... todas esas cosas acojonaban.

Los padres no dejaban ver esas películas a sus hijos, a no ser que estuvieran dispuestos a tenerlos vagando por el comedor hasta altas horas de la madrugada buscando monstruos con la linterna.

Todo ese cine estaba creado para conseguir que los crios aprendieran a desconfiar de los extraños, los extranjeros, el hiperhirsutismo y sobretodo a odiar a las personas diferentes. Por aquel entonces las turbas de gente armadas con horcas y antorchas impartían justicia y nadie usaba la expresión pelotón de linchamiento para referirse a ellas.

Pero esta fijación de hollywood de convertir a los monstruos clásicos en un producto mojabragas.... ¿Que mensaje envía eso a los adolescentes impresionables? Pasa del chico del montón y ver a por el de 90 años que se alimenta de sangre y se pasa el día sn camiseta... En serio, vamos mal".

...

Y después de la tontería obligatoria de cada entrada vamos a algo más serio. ¿Que? Ni de coña. Vamos a hablar de muñequitos, mi gran pasión junto a los comics, el cine de pésima calidad y música electrónica Eslava.

Como sabreis, un pequeño sector del grupo que no mola tanto llevamos un tiempo pegándole al Frostgrave (al que llamamos cariñosamente Frozen). La verdad es que el juego es divertido, yo por lo menos me lo paso bien. Y eso que no hay forma de que suba de nivel...

CREANDO LA BANDA

La primera en la frente. En lugar de leerme el libro y ver cuales eran las mejores posibilidades, recuperé unas viejas miniaturas de Mordheim y les puse las reglas en función a su aspecto. El Sacerdote Cazador de Brujas Mercenario tenía pinta de Traumaturgo... así que me dije, adelante con ello.

Además, por lo que iba leyendo los Traumaturgos eran una especie de magos de apoyo, que iban curando y protegiendo a la banda. Y pensé... "voy a hacer un Mago pacifista..." La idea me pareció muy buena, hasta que llegué a la parte de como se consiguen los Xp.

Pero mi cabeza además de grande es muy dura, y decidí ir adelante con ello con todas las consecuencias. Todas y cada una de las dolorosas consecuencias que ello trajo... Frustrantes, duras, dolorosas, desagradables y agotadoras consecuencias... del mal.

DE MINIATURAS Y HOMBRES

Los primeros el Mago Centurius Secundus (hubo un Centurius Primus, pero tuvo un accidente, más adelante lo explico). Y su aprendiz Samael. La primera idea es que Samael fuera un matón más, pero me di cuenta de que el aprendiz como tal es imprescindible. Y es la única miniatura que lleva un libro a cuestas. Así que a aprender...

El pescado congelado hace de arma adicional con -1 al daño.

Los tres arqueros Bretonianos son "Los Trillizos", en algunas partidas "Los Gemelos" en función de como vayan las visitas al hospital. Quedan perfectas con el aspecto global de la banda porque parecen pequeños monaguillos de metal rescatados de los 90´s.

9 de cada 10 veces no le dan a nada. Pero a lo que le dan lo matan.

El tipo con pinta de haberse perdido es Vincenzo, un ladrón con más vidas que un gato, porque en todas las partidas acaba con un virote en la espalda pero nunca ha muerto. El mastín de guerra originalmente se llamaba Remo, pero este sí que muere en todas las partidas, y ha sido rebautizado como Kenny.

La pose rara del ladrón, se debe a que lo monté a partir de un ballestero.

Lo dos matones de la banda son Gunnar y Ursus. El primero es un artista callejero que al no poderse ganar la vida como ventrílocuo decidió irse a ganar fortuna a Felstad. El segundo sacó a pasear a su oso y lo perdió de vista, ahora viaja por el mundo buscándolo de forma incansable.

Vamos a ir subiendo un poco el caché. Pietro el hombre de armas, que se estrenará pronto en la banda. Y Dieter el cazador de brujas tesoros, que es el ninja residente y da los mejores resultados en la relación coste-efectividad. La parte negativa es que con esa pedazo espada es el que más cuesta de guardar.

Por último, un ogro de Golgfag reciclado en un bárbaro, al que he llamado Grond, porque no me gusta pensar. Y la única miniatura de plástico de la banda. Una conversión de arquero bretoniano, con un arco algo mejo y una cabeza de catachán. Que va a hacer de Rastreador... ¿No era ese el del arco y el palo?

El Ogro acojona tanto que cae el primero en todas las batallas

EL TERRENO DE JUEGO

A falta de algo mejor estamos usando una mesa medieval llena de todo lo que podemos encontrar. A cada partida aumentamos el número de los elementos de escenografía que desplegamos, porque los arqueros y los proyectiles mágicos están demostrando ser demasiado definitivos en el desarrollo de la batalla.

Esta es de las primeras mesas que jugamos, pese a lo que pueda parecer es un campo de tiro. Me estuvieron matando miniaturas desde lo alto del puente toda la batalla. Lo recomendable es poner el edificio más gordo en mitad de la mesa, e irlo rodeando de otros cortando todas las líneas de visión que vayan de punta a punta.

Me hubiera gustado hacer un informe de batalla, pero no había suficientes miniaturas pintadas. Me lo reservo para más adelante, cuando todo tenga el aspecto adecuado. Aunque conseguir reunir dos bandas pintadas al completo va a ser muy complicado por problemas de agenda de los viejunos.

Consejo: Usad siempre la tabla de encuentros aleatorios, sobretodo en mesas grandes como esta. Los monstruos aportan mucho interés al desarrollo de la batalla. Además, hacerse con un buen set de monstruos supone solo un par de viajes a la caja de restos.

Y estas son las de plástico mono-pieza...

Una pequeña muestra de toda la morralla que usamos para las batalla. De ahí ha salido de todo. Y cuando no tenemos de algo... se fabrica, como por ejemplo el genio de la lámpara.

Como digo siempre, el que no se apaña es porque no quiere.

Como en mi mente debía recordar más a un Djinn que a un demonio clásico usé un torso de Enanos del Caos Centauro del Bloodbowl, unas patas de elfo y mucha mucha masilla. Todos los Npc´s están siendo pintados con colores azules, como si fueran criaturas de hielo, el próximo día os enseño las arañas, los espectros y el demonio menor

En el cofre había un espectro armado con una motosierra.

La primera misión que nos salió fue la de las "Casas Encantadas de Conocerle". Colocamos tesoros dentro de las casas, pero solo en las que abrí yo aparecieron espectros. Aquella batalla la acabé con 6 miniaturas en el hospital y una de ellas muerta de forma definitiva.

Mirad que motivados y limpitos iban a su primera batalla. Los dos Matones y un Arquero fueron troceados por espectros. El Mago y otro Arquero murieron cosidos a flechazos. Al final el Aprendiz tuvo que huir con lo poco que quedaba mientras el Cazador de Tesoros entretenía a la banda enemiga.

MIENTRAS TANTO

El gato de la familia Cabot trata de distraerme haciendo parkour horizontal. He tratado que deje dicha actividad, pero mi madre dice que le saca brillo al suelo y que es el único ejercicio que hace en todo el día, así que me toca dejarle hacer.

Yo: ¡Respeta la ley de la gravedad!
El: !¡Nunca¡¡

LA CAMPAÑA


No tengo mucha foto decente de lo que se ha ido haciendo, jugué tres escenarios con la banda inicial, la de las casas encantadas, el genio de la lámpara y la de las estatuas vivientes. En la primera recibí una paliza monumental a manos de dos espectros y la otra banda rival. Y en la segunda escapé por los pelos pero con más tesoros y XP.

Abajo a la derecha tenemos a Ursus gritando: "¡No sin mi oso!"

Pero en la tercera palmo mi mago a manos de un ballestero de Mordheim reciclado para Warmachine y reciclado para Frostgrave que con un 20 natural le hizo estallar la cabeza de un disparo.

Aquí podeis apreciar como hizo rebotar el virote en la mano de la estatua y de ahí a la frente de mi mago.

Eso no habría supuesto más problema, si no hubera sido porque salvé a 7 soldados y al aprendiz en la tabla de heridas graves, y la única tirada que fallé fué la del mago... puta bida tete. El Sr. Rubio me recomendó que cambiara de escuela de magia, pero no me pareció correcto, así que rehice la banda igual y cambié algunos conjuros de las escuelas alineadas y neutrales.

FUTURO INMEDIATO

Pintarme la segunda banda. Me gusta este juego, me da igual ser el colero de la campaña, me lo paso bien jugando hasta cuando se me mueren todos y el único tesoro que encuentro es un chupachups sabor cabra confitada.

Para la segunda he recuperado un puñado de Poseídos de Mordheim y le voy a dar a todo un tono un poco más agresivo. No es que quiera cambiar de banda, pero en campaña no se pueden repetir escenarios, así que si me toca jugar con alguien y sale un escenario que el no tenga pero yo sí, usaré la banda B.

1.- Mago Invocador
2.- Templario
3.- Hombre de Armas
4.- Arqueros
5.- Javalineros (en lugar de javalinas llevan hachas arrojadizas)
6.- Hombre de Armas
7.- Aprendiz con arma de mano y daga

Falta por ahí un perro para llegar a las 8 miniaturas. Me he decidido a darle un toque a lo Slaanesh porque lo hecho de menos en mi vida desde que en Age of Sigmar lo lanzaron al sol dentro de una caja de madera.

La miniatura de prueba escogida ha sido el aprendiz. Voy a seguir tirando de una paleta de colores fríos, porque queda bien con las peanas y aumenta la sensación de estar en una ciudad congelada. Por ahora, lo único que he acabado son los "Diablillos" del conjuro de "Invocar Diabillo".

La primera idea fué la de usar un par de Diablillas, pero tenía estos por ahí muertos de asco desde tiempos inmemoriales. Después de taparle los agujeros de las alas con masilla los pinté con sensuales colores carne y rosas para desconcertar a mis adversarios, que no sabrán si matarlos o pedirles el número de móvil.

Y esto es todo por ahora...

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Próximamente: Otras cosas.