Recomendamos leer esta y otras entradas, escuchando la música de Greg Illidge, para mejor inmersión.
El rastreador de movimiento detectaba varios rastros, pero según el escaneo biológico de la sonda del KingFisher no había detectado ninguna forma de vida.
-Ehm, capitán. Algo se está moviendo hacia nosotros -dijo lastimosamente Dituri
- ¿Puede tratarse de droides de defensa?
- No lo creo, se mueven muy rápido.
- De acuerdo, Zeichel, cúbrenos mientras accedemos a esta sección.
El Capitán Kold se dispuso a desencriptar los códigos de apertura.
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Bienvenidos y bienvenidas a este oscuro rincón de la Galaxia, donde pecios científicos abandonados, flotan a la deriva, mientras unos amables mercenarios se internan en él para saquear investigar en ellos.
Tras todos los acontecimientos explicados en esta entrada, el bueno de Kold, junto a una pequeña selección de hackers/gente de acción, se internaron en la Esmerald Otter, mientras el resto de la tripulación, de perfil más técnico, se encargaban de realizar las reparaciones de la nave.
Además a fin de asegurarme el éxito, opté por ponerle un ciber terminal al equipo del Capitán, de esta manera dispondría de dos figuras aptas para abrir puertas cerradas, hackear terminales, o desactivar lo que me pudiese encontrar por el camino.
Con estos 5 valientes, me dispuse a desplegar la primera baldosa (o tile) donde cupiesen los 5, y poner un conector frente a ellos (utilicé puertas para representarlo), y me dispuse a generar el mazo de terreno, tal y como expliqué en la anterior entrada.
En todo momento me aseguré que tanto el Rompecódigos (Dituri), como el Capitán, estuviesen acompañados o protegidos de cualquier otra figura, por si la cosa se ponía fea, también tenía previsto, en el mejor de los casos, desplegar en dos grupos para acelerar el proceso de exploración del pecio.
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Dituri acompañado del droide escolta, avanzaron en una pequeña sala con dos puertas de acceso, mientras el Capitán y Nylund, cerraban el acceso y protegían la retaguardia de los extraños movimientos que habían detectado, tras ellos.
Al abrir la primera puerta (cuya cerradura estaba abierta) son sorprendidos por un repugnante atacante, afortunadamente la unidad Neil-X se interpone descargando parte de su potencia de fuego, junto al Capitán Kold, abatiendo a la criatura, no sin antes, descargar prácticamente toda la célula de energía de sus carabinas.
- ¡Joder! ¿¡Qué coño era eso!?
- Calma, Dituri. Relájate, está muerto - dijo Zeichel, mientras pateaba el amasijo de carne y chatarra en la que había quedado el atacante.
Kold examinó los restos, mientras la unidad Neil-X accedía a una caja de recursos que parecía cerrada. Finalmente sólo tenía un pad de datos, que Dituri se descargó.
-Uh. - dijo el Capitán, mientras pasaba el bioescaner de su pad - la señal de interferencia que decías, Dituri, parece que sale de esto y está remitiendo.
- Esa cosa se movía rápido, jefe. - respondió Nylund también algo nervioso- deberemos de ir con pies de plomo, si hay más como eso.
- Tiene restos del uniforme y a juzgar por la identificación, parece personal científico.- el comando paso un rápido escaneo de la placa, ahora manchada de espesa sangre negra, para confirmar la identidad de los restos- ingeniera biomédica Junes Baltar. Vaya. Vaya.
Kold volvió a intentar ponerse en contacto con la KingFisher, pero la señal era muy débil, y en respuesta sólo oía estática.
- Sigamos, tenemos que recopilar más información.
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A estas alturas de haber revisado prácticamente la mitad de la nave con una pequeña pesadilla de pasillos, cruces y demás, muy locos, me di cuenta de dos pequeños defectos en el sistema que había hecho para la generación de baldosas, aunque de éstos ya hablaré más adelante, porque pese a avanzar bastante hasta la primera habitación grande de la nave, apenas hubieron encuentros, u obstáculos, más allá de alguna puerta que tuvo que abrirse de manera civilizada o no (en una utilicé al comando para reventarla a puñetazos).
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La cerradura electrónica finalmente se activó, la maldita cerradura disponía de un alto nivel de seguridad, en ella, lo que auguraba algo importante en el otro lado. Tras ello Kold, entró, asegurando la zona, no parecía que hubiese nadie en la sala, que apestaba a putrefacción.
La instancia estaba apenas iluminada por un haz de luz azulada, proveniente de algunos aparatos y dispositivos que todavía funcionaban.
En lugar, en otro momento, había sido un despacho, a juzgar por los papeles arrugados y manchados de sangre que aquí y allí, se encontraban.
- ¡Cuidado capitán!
Una de esas criaturas se había descolgado del techo, y Kold no la había visto, pero el Comando Zeichel sí, interponiéndose entre el Capitán y su atacante. Apenas podría haber sobrevivido por semejante embate, si no hubiese sido por la armadura pesada que llevaba, que pudo amortiguar el impacto, mientras parte del escudo personal, cedía, pero había conseguido rechazar a la criatura, que había saltado hacia atrás, con un desafiante siseo.
El Comando desplegó la hoja del antebrazo, lista para la acción, mientras avanzaba hacia aquella cosa, a su lado, el Capitán, que ya se había recuperado del shock, estaba disparando ráfagas de su carabina, que parecía que no acababan de causarle daño suficiente.
Zeichel, activó la hoja, emitiendo ésta, una tenue luz anaranjada, que indicaba que ya estaba preparada, y comenzó a describir arcos en el aire con ella, mientras partes de la criatura, caían al suelo, finalmente le atravesó la cabeza, con una facilidad pasmosa.
Tras asegurar la habitación, Kold buscó algún terminal en condiciones que todavía funcionase, pero sólo encontró un pad de datos dañado, que se guardó en su gabardina, si conseguían volver, podrían extraer información de la unidad de almacenamiento.
El resto del equipo llegaron a la habitación, Dituri desactivo la cerradura de una caja de recursos, que contenía un pequeño alijo de Neuro Vortex, una droga bastante potente, que podría canjearse fácilmente en el mercado negro. Así que la unidad Neil-X se dispuso a cargar con ella.
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Hasta aquí la partida parecía que el tema iba controlado, ya había encontrado los dos botines de la partida, el electrónico y el físico. Con lo que a partir de aquí, lo que encontrarse podría considerarlo como "gratis".
La única cosa es que al desbloquear el botín físico, activé el encuentro de "alarma activada", por el momento la IA había recibido señales de que alguien se había metido en la nave, pero todavía no lo consideraba una amenaza, esto hacía que los chequeos de aparición de drones bajasen en 2 puntos.
Durante esta parte de la partida, me atacaron algún que otro Drone, pero afortunadamente, sus perfiles son bajos, aunque tienen mucho aguante. En este caso, el bueno del cocinero, Nylund, pudo despacharse un par de ellos, y sin sufrir los efectos del miedo. La verdad es que el hombre, demostraría más adelante, que valía su peso en oro.
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Tras abatir a varias de esas criaturas (no había duda de que antaño habían formado parte de la tripulación de la Esmerald), con relativa facilidad, estaban gastando munición de manera preocupante, y corrían riesgo de quedarse sin ella, y tener que abatir esas criaturas a puñetazos, idea que no le agradaba nada a Kold.
Mientras estaba pensando en ello, algo le llamó la atención e interrumpió sus pensamientos: al final de un pasillo pudo ver la luz de un terminal de comunicación en perfecto estado.
Kold avanzó vigilando el acceso del pasillo, mientras que Dituri, se acercó al terminal, y conectó el suyo.
- Intenta abrir un canal de comunicación, o al menos, envía nuestra localización, para que la gente de la KingFisher esté avisada.
El comando algo herido por encuentros con varias de esas criaturas, cerró la comitiva, protegiendo a Nylund y la unidad Neil-X.
Tras conseguir acceder a una de las sondas externas del casco de la Esmerald Otter, Dituri pudo enviar el pack de información a la KingFisher. El Rompecódigos, respiró aliviado
Desgraciadamente esta violación de seguridad había sido suficiente para el Sistema, que llevaba ya unas horas observando y rastreando a los mercenarios. La IA asistente de la nave, de manera silenciosa, activó la alarma.
En cuestión de segundos, de una de las mamparas de la pared surgió otra de esas criaturas: atacando directamente al Capitán. Afortunadamente, la criatura no pudo pillar por sorpresa, esta vez a Kold, esquivando en el último momento, haciendo que está se estrellase contra unos tubos de ventilación.
Zeichel se acercó, disparando su escopeta, pero la maldita criatura no se moría, seguía acosando a Kold, hasta que éste activó un dispositivo de defensa personal oculto en su traje, que en un estallido azulado, golpeó a la criatura y la alejó varios metros, a suficiente distancia para que, ahora sí, el comando acabase con ella, descargado el doble cañón.
Pero el abatir a la criatura, no les dio ni un descanso, el escáner de movimiento estaba detectando varias fuentes hacia ellos, desde los pasillos que habían dejado ya, atrás.
- Señor, creo que se ha activado algún tipo de alarma - decía Dituri, mientras no paraban de llegar pitidos cada vez menos espaciados, de su rastreador.
- Vamos - el Capitán se quedó detrás, colocando un temporizador, junto a una de sus granadas térmicas. Estaba dispuesto a acabar con varias de esas cosas.
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Otra bajada del nivel de dificultad del chequeo de aparición de Drones, provocó que en cada sección de las que quedaba en la baraja, tuviese aparición de esos señores, si hasta ahora, con una de esas cosas, a nivel solitario me las había sacado de encima fácilmente, la cosa se complicó de sobremanera, cuando comenzaron a aparecer en oleadas.
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En cuestión de minutos, la situación de Kold y sus seguidores se había convertido en una carrera hacia adelante, huyendo de las criaturas que ahora les acosaban en manadas,
Zeichel, se quedó atrás, disparando su escopeta y granadas, cortando el avance de esas cosas
- Seguid, yo me encargo de esas abominaciones
Dituri se acercó a otro terminal, enviando más datos a la KingFisher, mientras otra de esas cosas de descolgaba del techo, y atacaba a la unidad Neil-X
Kold ayudó a Nylund a hacer frente a otra criatura que surgió de uno de los pasillos.
¡De repente, todos estaban aislados, y luchando por su vida!
Zeichel descargaba una y otra ráfaga, seguida de alguna que otra detonación de granada, abatiendo y cortando el avance de aquellas abominaciones, sin embargo, en una de esas explosiones, parte de las mamparas de la nave se desprendieron causando daños al Comando, parecía que aquél pasillo ya no lo podrían utilizar, pero ahora estaba gravemente dañado. Se apoyó en la pared, intentando recuperar resuello, mientras oía los gritos y exabruptos de sus compañeros, a través del intercomunicador.
El droide había utilizado la pesa caja metálica para evitar daños mayores en sus sistema motrices, esto le permitió a Dituri, el tiempo suficiente, para desenvainar su cuchillo de combate, y entre los dos, desembarazarse de su atacante.
Mientras, Kold y Nylund, consiguieron, entre los dos, hacer lo mismo con el suyo.
Habían conseguido sobrevivir a este asalto, pero por los pelos, Kold dio la orden de reagruparse, y pudo aplicar anestesia, y primeros auxilios en el herido comando. Había sufrido muchos daños, pero no estaba muerto.
Los cinco avanzaron por el ancho pasillo hasta llegar a unas grandes compuertas, todo indicaba que se trataba del laboratorio, donde, según sus informes, todo esto se había generado.
Kold desencriptó el código, y Nylund y Dituri, avanzaron rápidamente para asegurar la zona.
La instancia estaba iluminada, con lo que pudieron ver todo el horror. Aquí y allí habían restos humanos, que eran ensamblados en dispositivos, que bombeaban un repugnante líquido oscuro. Todo esto ocurría dentro de lo que antaño habían sido cápsulas médicas, pero ahora, habían sido alteradas, y estaban cumpliendo otros siniestros cometidos.
Los cinco pudieron ver con horror, como una de estas abominaciones, recién construida, se levantaba y se movía hacia ellos, seseante.
No había tiempo que perder, tenían que desactivar y destruir esas cápsulas, fracasar significaba formar parte de esas cosas.
Nylund sin pensárselo dos veces, se lanzó contra una de las cápsulas, y de manera enloquecida, comenzó a destruir parte de ella a golpes de su catana monofilo.
El resto se dispusieron a hacer lo mismo, avanzando y descargando fuego de sus carabinas y escopetas contra las abominaciones que se iban levantando.
Algunos fueron abatidas, otras llegaban y atacaban a nuestros incursores, afortunadamente, conseguían o bien desembarazarse de ellos, o abatirlos sufriendo pocas heridas. De echo, Nylund se dedicó a proteger el resto de sus compañeros, mientras avanzaban y destruían el resto de cápsulas, mientras el Comando, aportaba fuego de apoyo.
Finalmente consiguieron destruir las 4 cápsulas y abatir a las criaturas que se habían levantado.
Kold consiguió acceder a uno de los terminales, y enviar el resto de información a la Kingfisher, su ubicación dentro de la nave, y lo que estaba ocurriendo.
La comunicación fue interrumpida por el sistema de la nave, se activaron las alarmas y los protocolos de aislamiento. No podían permitirse quedarse aislados en esa parte, y sin oxígeno.
Nuestros cinco héroes sólo les quedó otra cosa que correr por los pasillos, hacia otra sección del pecio inexplorado...
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Pues bien, con esto hemos conseguido sobrevivir a este primer escenario de la campaña, con la mitad de la tripulación atrapada en la nave controlada por una IA hostil que le ha dado por montar engendros biomecánicos, mientras la otra parte está reparando la nave.
Este escenario se ha saldado con lo siguiente:
Botines: todos (2 digitales y uno físico)
Consolas hackeadas 5
Drones abatidos: 10
Puertas desbloqueadas 12
Bajas Sufridas: 0
Turnos de juego 12
Y ahora las conclusiones de las reglas que hice en la anterior entrada. Es evidente que no son perfectas, es por ello que recomiendo que el propio jugador ajuste en el momento dado que vea, y esto es así por la cantidad de componentes aleatorios que determinan los tiles, conectores, las puertas, etc... Así que ante todo, disfruta de la partida y si ves que, p.ej se han cerrado todos los caminos y no puedes continuar, genera una puerta en la última estancia y prosigue la partida.
Otra cosa, procura barajar bien las cartas, antes de montar el mazo de exploración, ayudará a que sea más ameno.
Por otro lado, recuerda que la secuencia de ronda en el juego solitario cambia, la fase de criatura y soldado se invierten generando situaciones en los que los enemigos actúan antes que tus figuras, esto es importante tenerlo en cuenta.
Y por último, un par de aclaraciones que he visto que no comenté en la anterior entrada:
La primera es la aparición de los conectores, yo utilicé un sistema sencillo, primero tiraba el D3-1, para saber cuántos había en esa nueva localización, y luego con este esquema, determinaba donde colocarlos.
Un poco a criterio que más divertido de parezca. El tema de los conectores, es simplemente eso, una ficha o una puerta, que indique por ahí sigue el camino.
Esto me lleva a la segunda parte, cualquier figura puede descubrir una sección, simplemente colocándose en contacto con el conector e indicando que lo activa, es entonces cuando sacaremos una carta del mazo y veremos qué sección sale.
Para más incertidumbre, si había puerta, sólo colocaba el tile y la puerta. Hasta que la figura no decidiese abrir la puerta, no hacía las tiradas para ver que había dentro. Eso generaba situaciones un tanto incómodas como "mierda, acabo de meter al Rompecódigos delante de un Drone".
El descubrir una nueva sección no requiere de uso de acción, es gratis, pero una misma miniatura sólo puede hacer esto una vez por activación.
Y con esto, dejaría ya el ladrillo de hoy, la última chapa del año.
Pasad una buena entrada de 2024, y nos vemos el año que viene.
Un abrazo.
Esta quedando genial, dan ganas de pillar un kit de esos de baldositas para montar una en casa.
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