[Eddie Cabot] Re-pintando más juguetes para el Grimdark Future

  "Amenazar con pulsar el botón rojo es algo del pasado, de cuando todavía creíamos en cosas como la Guerra Nuquelar. Hoy en día, con nuestro mundo controlado por multinacionales y multimillonarios, el holocausto nuquelar es tan probable como la existencia de vida inteligente dentro del planeta tierra.

No vas a bombardear, incinerar e irradiar cosas que luego puedes vender, o directamente a la gente a la que le quieres vender esas cosas. Así es como piensa el empresario, y desafortunadamente hemos dejado que cojan el poder.

En un mundo ideal, obligaríamos a esos empresarios a enfrentarse los unos a los otros en combates de gladiador. Donde solo saldría perjudicado el menos preparado para una lucha a muerte. Los demás podríamos verlo en TV y apostar a ver quién gana el campeonato de cada liga. Uno para los CEOs de las farmacéuticas, otro para los del mundo de la automoción, otro para los fabricantes de armas.

Como el Celebrity Deathmatch. Pero en ganador se quedaría la franquicia del perdedor. Y desaparecería la "sana competencia" con la que nos están asesinando lentamente a los demás. Se lo que estáis pensando, quitar la competencia provoca la aparición de los monopolios y acabaríamos peor que antes.

No hay problema, tenemos más formatos televisivos donde meterlos para convertirlos en mejores personas... es solo cuestión de encontrar el adecuado".

Bienvenidos niños y niñas a la casa de "...si puedo pagarlo, hay que pintarlo." Seguimos queriendo ver arder el mundo y combatiendo los precios del Evil Empire. El otro día el Sr. Rubio pasó unas fotos en el chat viejuno, del grupo de Facebook de Stargrave (uno de ellos, no se cual).

SEGURAMENTE EL ÚNICO QUE HAY

Y resulta que nuestros hermanos guiris se han vuelto locos con los juguetes de la controvertida película Buzz Lightyear y los están comprando para usarlos como escenografía. Así sin repintarlos ni nada, sacarlos de la caja y ponerlos en la mesa. El caso es que estaba yo en el Carrefour cuando pasé por delante del stand de las navecitas estas. Y una se vino para casa.

Concretamente esta. el XL-07, que es mi talla de gorra. No es la que me habría llevado de haberla encontrado, hay una que se llama Armadillo que es una copia del transporte de desembarco de tropas de la película Starship Troopers, pero me hacía falta una "Cañonera" para mis enanos del Grimdark Future y por los 15 pavos que ha costado, no le iba a poner pegas encima.

Lo primero era comprobar la escala, bastante correcta. No iba a dar para "Cañonera", pero sí para un caza. Estuve barajando la opción de pegarle armas, pero me encontré con dos problemas, una, la caja de restos no me proporciono nada decente. Dos, me daba toda la sensación de que pegarle armas a ese casco tan pelado le iba a dar todavía MÁS aspecto de juguete.

También me estuve planteando currarme un piloto para la cabina. Montando solo el torso de uno de mis enanetes y fijándolo con masilla al asiento. No sería la primera vez, lo había ahecho en alguna ocasión con otros proxis y marines espaciales. Pero me iba a dar mucha faena y tenía ganas de acabar rápido.

Primer paso, darle un poco de lija. O en mi caso, estropajo y lima de modelismo. Ojo con este paso, porque todo el caza no es del mismo plástico. Mientras que el chasis es plástico duro, las toberas y las puntas de la horquilla son más bien de goma, en ese punto no conviene rascar en exceso.

Segundo paso, pintar la carlinga por dentro con pintura metálica. Como el plástico era de color amarillo transparente, con la capa de metal de fondo quedó dorado Según me contó Marvin eso se hace en los cazas F-15 para despistar a los radares enemigos de toda la radiación que suelta la cabina.

Que digo yo... irradiar al piloto quizás tampoco sea buena idea. Pero el caso es que imprimado ya empieza a tener otro aspecto. En ese punto te lo puedes imaginar pintado con docenas de esquemas de colores diferentes, como rojo Ángeles Sangrientos, verde Ángeles Oscuros, blanco Chelembrimbor...

O más probablemente, de color amarillo limón. Utilicé la misma técnica que con los tanquecitos del reto "Todo a 1 Pavo". Pintarlo todo de marrón y después hacerle un punteado de Iyanden Darksun. Además de añadirle rojo a algunas zonas para romper la monotonía del amarillo, resultó que le he copiado el esquema de color de sus vehículos eldar al Sr. Marrón. Fallo mío.

Pero como se ha descolgado oficialmente de la campaña de Grimdark Future (que ni siquiera tenemos claro que vayamos a jugar), no hay posibilidad de que sus vehículos y los míos se crucen en la mesa. Con lo que evitaremos ese incómodo momento que se crea cuando dos pijas se presentan en una fiesta a la vez con el mismo vestido.

No se si existe equivalencia a tal situación en el mundo friki. Gracias a dios la variedad de camisetas negras con motivos estampados de bandas de heavy metal, frases políticamente incorrectas y dragones es lo bastante amplia como para que no coincidan dos iguales en el mismo evento. Salvo que elijas la camiseta del "Hellfire Club" que ahora se ve por todas partes y se ha vuelto más mainstream que el respirar.

Dejando de lado la tendencia para moda friki otoño-invierno. Con el caza pintado me hacía falta una peana decente. Tenía por ahí un disco de madera de "aproximadamente 12 cm" comprado en mi proveedor asiático habitual, por si algún día me hacía falta. Pues nada, ha llegado ese día.

La nave viene con un agujero en la base, que tiene toda la pinta de servir para colocarlos en algún tipo de expositor. Ni idea de si venden ese expositor por algún lado, pero me iba a ir la mar de bien para fijarlo a la peana. Tras calcular de donde iba a salir el palo donde iba a pinchar la nave, tocaba encontrar un "mástil" adecuado a tal uso.

Tras probar varias opciones, me decidí por un palito de madera que afilé con un sacapuntas. ¿Motivo? El agujero de la base de la nave se estrecha en el interior. Por lo que no me valía un palo completamente recto, si no algo más afilado como si fuera un lápiz. De hecho, acabó teniendo aspecto de lápiz.

El invento me salió bien, encaja casi a la perfección y una vez colocado sobre el palo la nave no zozobra. Ideal para algo que se va a caer de su peana de dos a tres veces por partida. O puede que no. ¿No estáis hasta las pelotas de ver como se caen vuestros voladores por encima de la mesa de juego? ¿Siempre os habéis preguntado el motivo? ¿Es que nadie va a pensar en los niños?

No tiene mucho misterio, el problema viene porque normalmente la aeronave tiene más peso que la peana que lo soporta. Pasa siempre con los de James, una nave muy grande y muy bonita, que se sujeta con una peana carísima que pesa como la mitad que la nave. Con lo que nunca está bien equilibrada y se cae en cuanto le das un golpe a la mesa o la peana queda sobre terreno irregular.

El truco (si es que puede llamarse así), consiste en meterle peso a la peana. Si esta acaba pesando lo mismo o más que la aeronave, es más difícil que esta arrastre consigo a la peana por su peso. Tenía arcilla de modelismo seca en forma de losas, que me había sobrado de otro proyecto y que pegué alrededor del mástil para que quedara mejor fijado y la peana ganara algo más de peso.

Después llegó la parte divertida, la de pegarle una tonelada de restos para representar un campo de batalla. Tenía por ahí ruedas de oruga de un land raider, piezas de una maqueta de un tanque, cachitos de plástico variados, en fin, todo lo que necesitas para que parezca que alguien ha vomitado un tanque a medio digerir sobre la mesa.

Para dejarlo todo más o menos unificado, rellenar toda la base con masilla para madera. Barato, fácil de aplicar y tiene una textura muy interesante una vez está seco. Se puede mezclar con arena de modelismo para hacerla más consistente, y una vez seca se puede pintar encima de ella sin problemas.

Como pasa con el caza, una vez imprimado en negro ya va teniendo otro aspecto. Y también te lo puedes imaginar con diferentes tonos. A base de grises, o colores tierra, incluso tierra del desierto con una pila de paredes de adobe o de ladrillo rolo cubiertas por capas y capas de cal... o suelo marciano.

 
Que es básicamente como he pintado todo lo demás. Y no hay nada que diga más "ejército cohesionado" a simple vista, que el hecho de que todas las peanas sean iguales. Las miniaturas pueden tener esquemas diferentes, pero lo que le va a dar pinta de ejército es que todos pisen el mismo suelo. A falta de un poco de césped y de varias capaz de barniz mate, la peana ya estaba acabada y me podía ir a dormir.

VAMOS A LAS FOTOS DE PROMOCIÓN

El juguete me lo pillé el Martes en el Carrefour, lo dejé casi acabado el Miércoles, lo rematé el Jueves que fue también el día en que monté y pinté la peana entera. Hoy Viernes a primera hora le he dado las últimas capas de barniz a la peana. Con lo que en total... sí, más o menos dos días y medio para todo. Y un coste de unos 16 pavos, sin contar los restos.

Estoy contento con el resultado final, aunque me habría gustado currarme la cabina del piloto. Digamos que empecé con ello, no quedó nada bien y no tenía ganas de perder más tiempo en arreglarlo. Esas horas se invirtieron en completar el proyecto. También influyó el problema de que la nave no se puede desmontar, no sin romperla y llegar con el pincel a todas las partes no era nada fácil.

Las turbinas las pinté apagadas, porque así llegado el caso la nave me sirve como escenografía para las partidas de Stargrave. Viene con tres patitas replegables para ponerla sobre ellas y que no se raye la panza de la nave. La verdad es que de detalle no va mal el juguete, si además estuviera mal pintado habría sido un firme candidato a entrar en el reto "Todo a 1 Pavo" de este año.

La peana acabada, con unos pegotes de césped para romper la monotonía del color terracota con el que he pintado toda la superficie. Y varias capas para quitar todos los brillos que había acumulado. Me cargué un poco las subidas de color de la parte gris, las losas de piedra. Pero el conjunto no queda mal, tampoco queremos que la peana destaque más que la aeronave.

Que dicho sea de paso, teniendo en cuenta que el caza va pintado de amarillo es algo difícil. Siempre que hagáis peanas de este tipo, acordaos de pegarles cosas que delaten la escala del modelo que acompañan. Rifles, cráneos, ruedas, cajas de munición. Cosas que ayuden a hacerse una idea del tamaño del campo de batalla. Y en las que son tan grandes como esta, incluso poner alguna miniatura que te sobre (y pegue con el conjunto, no pongáis un puto Hobbit en una peana sci-fi, por ejemplo).

Ahora me falta probarlo en mesa, por lo que he leído las aeronaves en este juego no son nada del otro mundo. Pero como no los he jugado nunca en 40K, por lo menos podré probar la experiencia de tener un trasto que no controla objetivos, que no puede frenar. 

El caso es que cuesta una buena cantidad de puntos, con la navecita, un tanque de batalla que tengo todavía por montar/pintar y las piezas de artillería móvil del otro día, tengo casi 1.000 puntos de Grimdark Future. Con lo que no tendré que pintar mucha más infantería para llegar a los 1.500.

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Y hasta aquí el episodio de hoy de Eddie os ayuda con la economía doméstica. Vale, no es tan bonito ni oficial como un caza Nephilim por ejemplo. Pero no vale los 62,50 € que cuesta el caza Nephilim, ni necesito gastarme más de 50 pavos en codex para tener las reglas, porque las de Grimdark Future están gratis en los internets.

¿El hobbie es caro? Pse, ya no tanto...